“Ética y cívica”. Así se llamaba la asignatura con la que me “adoctrinaron”, en Castilla-La Mancha, hará ya más de 20 años, en los inicios de nuestra “democracia”. Aunque lo cierto es que de esa asignatura lo único que recuerdo es el nombre, que era una maría y... a la profesora (cosas de adolescentes, supongo).
¿Adoctrinado? En absoluto.
Ni la asignatura de “Ética y cívica” causó efectos significativos en los alumnos de los 80, ni “Educación para la Ciudadanía” va a causarlos en los jóvenes de hoy en día. Aunque algunos, tal vez, así lo pretendan. Los valores cívicos y morales no se aprenden de los profesores. Se aprenden de la familia y, sobre todo, de la sociedad.
Y los políticos lo saben.
Pero entonces, ¿cómo se explica toda esta polémica sobre adoctrinamiento?
Si EpC no sirve para adoctrinar, ¿por qué se queja el PP?
Si EpC no sirve para adoctrinar, ¿para qué la ha impuesto el PSOE?
Muy sencillo. EpC existe para crear polémica. Para generar titulares. Para hacer creer a los ciudadanos que ambos partidos, cada uno a su manera, luchan por sus votantes, por la educación de sus hijos. Y para distraer la atención de los ciudadanos del auténtico problema del sistema educativo español: que es una monumental bazofia y va a seguir siéndolo. Nuestras escuelas son fábricas de zotes. Somos los reyes del fracaso escolar. ¿Cómo van a adoctrinar a nuestros escolares, si ni siquiera son capaces de enseñarles a leer y escribir correctamente, a sumar y restar sin calculadora...?
No. No van a adoctrinar a las nuevas generaciones gracias a asignaturas como EpC. No es así como funciona. El adoctrinamiento se realizará, pero fuera de las aulas.
Aunque para ello es necesario que se cumpla una condición. Que los futuros ciudadanos no piensen, no razonen y que ignoren, cuantas más cosas, mejor. Y esa es la función que realiza nuestro sistema educativo. No adoctrinar, sino dejar a los adolescentes sin recursos intelectuales suficientes para resistirse al adoctrinamiento al que van a ser sometidos. Cuando salgan de la escuela.
Y a fe mía que está funcionando.
Ah, les voy a contar un secreto. Sí que hay una asignatura importante con respecto al adoctrinamiento. Pero no es “Ética y cívica”, y tampoco es “Educación para la Ciudadanía”. Para nada. La asignatura clave son... las ”mates”.
Adivinen por qué.
2 comentarios:
Lástima, nada nuevo:
Aquí nadie se acuerda de lo que escribió Kuan-Tsu hace veinticuatro siglos:
«Si haces planes para un año, siembra arroz. Si son para diez, planta árboles.
Si son para cien, instruye al pueblo. Sembrando una vez el grano, cosecharás una vez;
plantando un árbol, cosecharás diez veces; instruyendo al pueblo, cosecharás cien.»
En tu comentario reflejas la triste y penosa realidad en la que nos están sumergiendo esas bandas (la que controla el país y la que quiere controlarlo.)
http://glomayol.blogspot.com/
2004/12/fabricar-zopencos.html
Podríamos escribir un artículo igual todos los años y seguiría de actualidad. Las fábricas de zopencos llevan trabajando ya muchos años.
Una pena.
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